Si al leer el titulo de este post te ha saltado tu vena romántica, te advierto
que quizas te desilusione, voy a caminar por una senda donde el compromiso
adquiere valores mas globales que el del terreno personal.
Me gusta, y digo mas... me emociona ver a gente comprometida con una causa, una idea o un proyecto... no es fácil encontrarte a ese tipo de personas.
Me gusta, y digo mas... me emociona ver a gente comprometida con una causa, una idea o un proyecto... no es fácil encontrarte a ese tipo de personas.
Cada día me convenzo mas que
las palabras sin acción, sin compromiso, no tienen fuerza para cambiar nada, y
lo dice un bloguero ¿Qué ironía, no?. Podéis pensar que alguien como yo, que
escribe, opina o reflexiona sobre ideas o comportamientos, no tiene la
suficiente legitimación para hacerlo, y puede que tengáis razón. Aunque en mi
foro interno, pienso que siempre he intentado comprometerme y sigo haciéndolo, aunque en múltiples ocasiones no haya servido de mucho.
No
soy amante de las frases políticas ni tampoco soy demasiado romántico, pero
siempre me he sentido identificado con aquella frase de JFK, que oscila entre el
idealismo cuasidemagógico y el romanticismo: "No preguntes lo que tu pais puede
hacer por ti, pregunta lo que tú puedes hacer por tu pais"
Por esto, y
ante todo, este post no es mas que un mensaje de animo para aquellos que quieran
pasar a la acción, para los que quieran adquirir ese compromiso con lo que
creen, con lo piensan o sienten. Si tu barrio está sucio, coge la escoba y monta
un grupo de limpieza para demostrar que se puede hacer mejor. Si tu empresa te
trata mal, haz algo para cambiarla aunque no le guste a tus jefes. Si te gusta
el deporte, monta una agrupación que promulgue los beneficios del mismo en tu
comunidad. Si tienes una idea en la que crees, haz todo lo posible por hacerla
realidad... Siempre se puede hacer algo contra lo que no te gusta, siempre se
puede hacer algo para impulsar aquello en lo que crees.
Eso si, ya os
aviso que el camino es una putada, en la mayoria de ocasiones por la
incomprensión del que te rodea y en otras, espero que las menos, por su cobardia
o conformismo. Pero el camino del compromiso tiene dos cosas excepcionales, esas
pequeñas metas que vas consiguiendo te hacen inmensamente feliz por momentos y
además, en todos los casos que conozco, esa felicidad es compartida con otros
que son tus acompañantes necesarios para recorrer el camino.
Por unas
cosas y por las otras, digo aquello de "el compromiso, tan cerca tan lejos"